“Agua grande, selva y vida”
Jorge E. Padula Perkins
Desafían los vencejos al torrente;
lo atraviesan con sus ansias por volar.
Y hasta anidan en el muro subyacente,
protegidos por el agua en su raudal.
Selvas mixtas de región paranaense
del lapacho, el palo rosa y el aguay;
de coatíes, mariposas y de peces;
del ceibo, del ingá y del curupay.
Agua grande, Iguazú, caudal de afluentes,
hogar magno del tucán y del cupay;
cataratas que se lanzan, imponentes,
cuando el río en el barranco halla el final.
Maravilla universal del continente
de Brasil y de Argentina, majestad.
Más de doscientas cascadas imponentes
con la Garganta del Diablo y su caudal.
Agua y tierra guaraní como su gente.
Selva y río que se enciende en un tronar,
cuando cae el agua toda en la pendiente
para irse mansamente al Paraná.
De colores y sonidos persistentes
plena la vida animal y vegetal,
donde el río que se torna arborescente
es demiurgo de la magia del lugar. |