De
Tilcara - Zamba.
Cuando, a lo lejos, escucho quenas,
triste me pongo a recordar
(esas canciones que me cantabas
allá, en las piedras de Tilcara).
Hoy, como entonces, me afligen penas;
penas que siempre suelen brotar
(como las flores de un viejo tala;
lleno de espinas mi amor está).
Yo volveré y con mi zamba te recordaré;
notas al aire dirán tu nombre
y, en la quebrada, resonarán
los ecos tristes que me cantaban
allá, en las piedras de Tilcara;
lará laraira...
allá, en las piedras de Tilcara.
Cuando amanece en la quebrada
y la mañana quiere asomar,
(rezando coplas le pido al cerro
que ataje el alba: quiero soñar).
Soñar quisiera solo en la noche:
ella es testigo de mi querer;
(querer oscuro como su manto
así es mi canto un padecer).
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