Flor de primavera

No tienes niña fugaz
la ternura de la luna,
nostalgiosa, llevas el encanto
sonroseándose en la noche.

No digas niña de amor
muéstrame sólo tus ojos,
florecida, paloma divina,
infinito mar de cielo.

No verás nunca, niña perdida,
quién te adore adormecida,
como el agua que no vuelve,
juventud que se termina.

Busca dentro de tu ser
el milagro de la vida,
alegría, gracia divina,
corazón que no se aquieta.

Huye el tiempo y no se va
el recuerdo de la tierra,
primavera, sincera plegaria,
es piedad que tanto ansías.