LA CAUTIVA
- Serenata
Popular
Reclina niña tu frente
Al ardiente mediodía,
sobre mí,
cuando vierta su armonía
que aquí reina un fresco ambiente
el tuyú,
y en las cuchillas se siente
estaremos garza mía
un perfume de alelí.
en la fresca sombra umbría
bajo un verde guaviyú.
Reclina bella cautiva,
Tú en la hamaca recostada
amorosa y sensitiva,
y en mi pecho reclinada
en brazos de Alborerí,
y junto a mi frente tú,
quien te ama con ansia ardiente.
al ardiente mediodía,
Reclina niña tu frente
cuando vierta su armonía
sobre mí.
el tuyú.
Si tus ojos son ardiente
Qué más quieres mi cristiana
resplandor
para tí
tus pupilas transparentes
si tu frente se engalana
como el agua de la fuente
con la pluma soberana
de purísimo color.
del cacique Alborerí.
Quien al verte no te mira,
Tendrás joyas y tesoros,
y por tí niña suspira
tendrás perlas y collares
a tí sola quiere amar,
que en la guerra conseguí,
y cautivo uno se siente,
entre sangre castellana.
si tus ojos son ardiente
Qué más quieres mi cristiana
resplandor.
para tí.
Las cristianas hechiceras
del Aduar
van gimiendo plañideras
su infortunio y su pesar.
El cacique no las mira
y por tí niña suspira
y a tí sola quiere amar,
aunque giman plañideras
las cristianas hechiceras
del Aduar. |