LONJA Y LONJA Recitado De Enrique Uzal Ya las mentas me han llegao que en la esquina de “Las Latas” hubo un revuelo de patas entre un “moro” y “manchao”. Con jueces y abanderaos, dos lonjas, muchas corridas, opiniones divididas y hasta oferta sobre aperos, pero pa’ mí, caballeros, se gastaron en partidas.
En cuestiones de cuadreras no sé hacerle asco a ninguno, pueden salir de uno en uno dentrando a voltear bajeras. Pa’ mí esa marca “Contreras” que tanta fama se ha echao y que hasta el mesmo “manchao” pudo ganarle en la raya, no son pingos de la laya que precisa mi “tostao”.
Como ando escaso ‘e dinero y jugar fiao es de necio, al final, precio por precio, les viá correr por el cuero. Que elijan cancha y rayero, metraje y hasta veedor y si es pluma el corredor ni les voy a pedir plomo porque sepan que en lomo del “tostao” va un servidor.
Por si un casual nos trenzamos les doy que elijan la suelta, a largar a cara güelta o al grito del primer vamos. Yo y mi “tostao” calculamos que está demás la partida, porque entre ida y venida uno se gasta en floreos mas, si esos son sus deseos que se hagan el gusto en vida.
A dos lonjas... ni sonceras se gastaron los varones, a mí me sobran talones pa’ definirles carrera. No acostumbro a hacer bandera, ni invoco a Dios que es pecao, nombrarlo en trance apurao y en juego, pa’ pior del caso, la fe... la llevo en el brazo y en las patas del “tostao”.
Que sepan pues los Zenones, los Flores y los Nicasios que ande el “tostao” gana espacio se achican los mancarrones. Que se apresten los mirones pa’ llevarle a los de ajuera las mentas de esta cuadrera y le digan que del cuero le haré cama al parejero como pago ‘e la carrera.
Ya está la palabra echada y que esto a naides asombre, me precio de ser muy hombre pa’ aguantar cualquier parada. Si dentro en una patriada gustándome la partida, sé jugarme de la vida lo que me sobra o me resta, pues antes de verla “puesta” prefiero verla perdida.
Estos
versos son “una respuesta” a “El Desafío” de Gualberto Márquez
“Charrúa”, pero escritos como un divertimento y no con maldad, ya que
Uzal y Charrúa eran muy amigos.
Tonito Rodríguez Villar.
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