Arriando el canto tucumano por el mundo
Queremos agradecer la colaboración desinteresada del Dr. Adrián Romero, Elsa Bulacio de Reynoso y Norma de Bulacio.
Paliza-Martos-Bulacio-Romero |
Este reconocido y consagrado conjunto tucumano ha tenido siempre la particularidad de formar parte del corazón del Norte Argentino y de ser una de las agrupaciones más queridas y respetadas de la música de raíz folklórica del país; pero los Tucus tienen una particularidad, sus canciones son conocidas pero pocos los guitarreros que pueden interpretarlas, y ello debido al matiz vocal de sus primeras voces, tenores a cuyos registros no todos pueden llegar.
El comienzo
El origen de los Tucus se remonta a 1959, cuando Ricardo Benjamín Romero y Santiago Jerez deciden cantar juntos y necesitando una primera guitarra citan a Héctor Hugo Bulacio (el Gringo), así forman el Trío los Ases. Al tiempo se autodenominan Las Voces del Surco, que tomó trascendencia cuando ingresa en 1960 Carlos Angel Paliza (el Chango), que venía de componer Los Forasteros (junto a José Miranda Villagra).
El nombre
Fue en Buenos Aires, donde Víctor Buccino (director artístico discográfico) los bautiza con el nombre que trascenderán las fronteras: Los Tucu Tucu. Sus actuaciones no obtuvieron el reconocimiento esperado, hasta que en 1965 ingresa César Manuel Martos (Coco) en lugar de Jerez que luego formaría Tucma Trío. En esta época los Tucus vivieron éxito tras éxito.
Grabaciones
La primera canción que grabaron Los Tucus fue Tu eres joya inmensa de José Miranda Villagra, y el primer disco se tituló Los Tucu Tucu ex Voces del Surco, y fue en 1963.
Los viajes
Pérez-Romero-Sánchez-Bulacio |
Recorrieron Bolivia (país que los acogió
como hijos propios), Paraguay y Uruguay, país donde tuvieron un programa propio
de televisión.
En 1970 visitaron con su música Alemania, Francia, Holanda, Italia y España.
También conocieron su canto EEUU y Rusia. Ese mismo año obtuvieron el Primer
Premio del Festival Folklórico Internacional de España.
Los reemplazos
Hacia 1973 se separa Coco Martos, para
integrar Los de Siempre e ingresa Carlos Alberto Sánchez. Lo curioso de estos
cambios es que la calidad interpretativa no disminuía, por el contrario, el
público cada vez reconocía más al conjunto.
En 1975 recibieron el Camín Cosquín.
En el año 1977 el Chango Paliza se retira, dejando su lugar a Roberto Angel
Pérez Manucci, que integraba por entonces Las Voces del Norte (con
Zeitune, Soria y Romero).
Las voces… qué voces!!
En un comienzo su canto era similar al de
conjuntos como Los Fronterizos o Los Cantores del Alba (Folklore del Norte Nº
5), pero de a poco fueron consiguiendo su propia identidad.
Cada uno tenía un timbre único: Ricardo Romero con su bajo tan particular, hizo
del recitado parte integrante del canto, Coco Martos tenía una voz llena de
color y mucha potencia y era colaborado con la altura y falsetes del Chango
Paliza (quien podía interpretar desde suaves zambas hasta poderosas bagualas),
cuando se producen los reemplazos de Martos y Paliza, el ingreso de Sánchez le
da una fuerza inusitada al grupo, el torrente de su voz puede ser evaluado en
canciones como Recuerdo del Portezuelo, Pescador y Guitarrero, o Vidala del Tucu;
por su lado Roberto Pérez, una de las voces melódicas más importantes de nuestro
folklore, complementó siempre a la perfección la potencia de Sánchez. El Gringo
Bulacio, con su segunda voz, se podría decir que era el menos notado, pero
indudablemente fue la voz que le dio el fondo sonoro a los Tucus, y su música y
guitarra adornaron los cantos y canciones del conjunto.
Reconocimientos
En su dilatada carrera fueron muchos los premios por su labor artística, así el Ñandú de oro en el Festival de Punta Arena (Chile), Premio a la Trayectoria en el Festival de la Tonada (Tunuyán, Mendoza), Premio Sadaic a los Grandes Intérpretes, Caballeros del Folklore (Cosquín), el Discepolín porteño, Premio Cóndor, Cosquín de Oro, etc.
Algunos éxitos
Fueron muchas las canciones de raíz folklórica que llevaron los Tucu Tucu al público, pero sin duda el Zafrero, Zamba de amor y mar, Candombe para José, La pobrecita, Arriando caminos, Pescador y guitarrero, Viene clareando, Ave María, Volver en vino, El gato de la fiesta, Nada tengo de ti, Tristeza del porqué tuvieron el sello inconfundible de el conjunto más importante que diera la provincia de Tucumán, provincia que los nombró sus Embajadores musicales.
Más datos:
- www.sadaic.org.ar
- Emilio Portorrico - DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE LA MÚSICA ARGENTINA DE RAÍZ
FOLKLÓRICA - 2da edición, Buenos Aires, el autor, 2004 (www.emilioportorrico.com.ar).